Carlos Miguel Aizaga
La innovación es un proceso fundamental en muchas áreas de la economía, su desarrollo constante ha generado avances tan profundos, que es difícil hacerse a la idea de cuán difícil podría ser la vida antes de grandes innovaciones, la imprenta, la máquina de vapor, la internet, son algunos ejemplos de ideas que una vez materializadas fueron decisivas en las relaciones consumidor-productor y en el devenir empresarial en general.
La innovación puede definirse como el proceso de descubrir nuevas ideas, las cuales, una vez aplicadas en gran escala, traen consigo cambios profundos en cualquier aspecto determinado, representando una evolución (en términos de recursos, alcance, practicidad, etc.) respecto a las formas anteriores a su aplicación. Empleada a la producción, generalmente trae consigo mejoras considerables sobre la productividad, es decir, en hacer más con menos, buscando optimizar cada uno de los factores que intervienen en el proceso productivo, al final del día, suele abaratar los precios de los bienes y servicios, lo que se traduce como una mejor calidad de vida para mayor población.
Es el economista austriaco Joseph Schumpeter, es de los primeros teóricos económicos quien otorga a la innovación el papel neurálgico dentro del crecimiento económico, haciendo énfasis particular en: 1) el rol del emprendimiento, 2) las instituciones con poder de adaptación a los cambios en el entorno y 3) el avance tecnológico.
Sus aportes iban dirigidos en transformar la mentalidad estática y cortoplacista, que se centraba en la participación de los factores clásicos de producción y dejaba a la innovación como un elemento exógeno del proceso, por lo que recalcó el papel que juega el dinamismo dentro de las economías, aproximando los ciclos económicos a un proceso de constante evolución, que es susceptible a cambios inesperados, donde la generación de ideas y la adaptación son fundamentales para mantenerse a la vanguardia.
A grandes rasgos consideraba el proceso productivo como la acción de “combinar materiales y fuerzas”, mientras que la innovación se enfocaba en la acción de “producir otras cosas, o las mismas por métodos distintos” De allí que consideraba cinco elementos fundamentales relacionados:
- La introducción de nuevos bienes
- La introducción de nuevos métodos de producción
- La apertura de nuevos mercados
- La conquista de nuevas fuentes de aprovisionamiento de insumos productivos
- La creación de nuevas organizaciones industriales
Desde el punto de vista empresarial es el desarrollo de innovación, el factor que hace la diferencia entre ser líder o seguidor y el que define el posicionamiento frente a la competencia. Además de ser elemento central en el rol y la personalidad del “verdadero” empresario, donde la innovación va de la mano con el liderazgo, la creatividad y el riesgo en la toma de decisiones para ser capitalizados en un mejor futuro para la sociedad en general.
Se hace referencia a “Economía de la innovación y del cambio tecnológico: una aproximación teórica desde el pensamiento Schumpeteriano” , “UnderstandingtheInnovationEconomy and ItsImpactonOurWorldy” y “The 3 Pillars Of TheInnovationEconomy”